San Juan de los Reyes: Un infravalorado monasterio de estilo gótico en Toledo

En 1476, la reina Isabel I ordenó la construcción de esta iglesia para conmemorar dos acontecimientos: el nacimiento de su hijo y la victoria en la batalla de Toro. Estaba destinado a ser su lugar de enterramiento hasta que cambiaron los planes y Granada se convirtió en su última morada.

El edificio fue diseñado por Juan Guas en estilo gótico isabelino, un aspecto gótico tardío habitual bajo los Reyes Católicos. También notarás influencias mudéjares, sobre todo en los techos del claustro. Es una mezcla que refleja las capas culturales de Toledo y la identidad cambiante de España a finales del siglo XIV.

Mira hacia el exterior de la iglesia y verás cadenas de hierro colgando de los muros. Procedían de prisioneros cristianos que habían sido retenidos por los moros. Tras su liberación, las cadenas se colocaron aquí para recordar su libertad.

La zona principal de la iglesia es estrecha y alta. Al entrar, tus ojos se elevan naturalmente hacia el techo. Las bóvedas de crucería son típicas de las iglesias del gótico tardío y estaban pensadas para elevarte espiritualmente.

En el centro del coro, verás puestos de madera finamente tallada. Detrás de ellos se alza un gran retablo dorado que muestra escenas de la vida de Cristo y de la Virgen María. Refleja la transición del arte medieval al renacentista.

Este claustro de dos pisos es uno de los lugares más tranquilos de la iglesia. El nivel inferior tiene arcos y un espacio ajardinado, mientras que la galería superior presenta un techo mudéjar de madera. Es tranquilo, apacible y un buen lugar para hacer una pausa durante tu paseo por Toledo.

La portada principal de la iglesia es detallada y destaca incluso desde lejos. Justo al lado, las cadenas de los presos liberados cuelgan a la vista. Forma parte de la historia de la iglesia y de su lugar en la historia religiosa de España.